Jamás se ha desplegado en España tal cantidad de material experimental con la intención de dar caza a un fenómeno extraño. El suceso en cuestión se ha producido en un inmueble clásico dentro de la casuística paranormal, la casa de la marquesa de Villasante Margarita Ruiz de Lihory, controvertido personaje que trabajó para el espionaje franquista, amén de desempeñar otras ‘siniestras’ funciones. |
Centralita de la Conserjeria de Industria, donde sucedieron diversos fenomenos. |
En resumen, para que el lector comprenda la importancia del lugar, nos remontaremos al año 1969 cuando el conocido sacerdote y ufólogo de Mairena (Sevilla) Enrique López Guerrero recibió una carta firmada por seres procedentes supuestamente del planeta UMMO en la que decía lo siguiente: ‘Nuestra primera residencia en España fue escogida en una población recoleta: Albacete. Una dama amante de los animales prestó asilo a mis dos hermanos, que durante su forzoso encierro pudieron realizar las primeras experiencias psicofisiológica con mamíferos de la Tierra…’. Años más tarde, el 6 de agosto de 1971, otra carta anunciaba que, tras experimentar con un virus extraterrestre de alto riesgo, éste había escapado al control de los ‘investigadores’ infectando a Margot Shelly, hija de la marquesa: ‘Hasta seis focos víricos se localizaron en el cuerpo de la enferma, todos ellos suficientemente profundos para no temer su irradiación exterior, pero presentando la dificultad inherente a su localización. las zonas afectadas se localizaban en globos oculares, tejido epitelial de la lengua y dermis palmar’. Por sorprendente que parezca el asunto tras fallecer Margot el cadáver fue exhumado por orden judicial ya que en la casa de la marquesa y tras el registro pertinente, había sido encontrada la mano derecha de una mujer en el interior de una vasija. El cuerpo fue horriblemente mutilado, faltándole dicha extremidad, los globos oculares, parte de la lengua y el vello público. Desde entonces la enorme residencia recibió el sobrenombre de ‘la casa de los fantasmas’. |
Fotos dentro de la Conserjeria de Industria de Castilla la Mancha. |
El rumor que recorre la población es que los terrenos sobre los que se asentaba el antiguo palacete fueron adquiridos por cuatro perras ante la falta de compradores ya que nadie quería vivir allí ‘en ese sitio donde se decía que habían matado a mucha gente y hacían cosas muy raras’. Además, el hecho de que numerosas familias abandonaran las viviendas al poco de comprarlas porque contraían |
enfermedades desconocidas, aumentó la leyenda. Con estos antecedentes, los investigadores José Martínez, Fernando Rosillo, José Luis Tajada, y posteriormente los coordinadores de esta sección dirigieron sus pasos al enigmático edificio, que actualmente es ocupado por las oficinas de la Consejería de Industria de Castilla-la Mancha. |
Los funcionarios aseguran que en ocasiones se han producido llamadas internas en el edificio cuando en éste sólo se encontraba el vigilante nocturno. En el momento en que se inició la investigación, el pasado 10 de marzo, en compañía de T. N. C., administrativa de la delegación, se produjo un suceso fuera de lo normal. La persona que la acompañaba, una mujer de 40 años de edad a la que llamaremos |
Fachada exterior donde se desarrollarón los fenomenos extraños paranormales. |
M. C., entró en un estado aparente de trance, afirmando que en el salón de juntas que se sitúa en el sótano del edificio estaba observando una presencia: ‘Esther, está ahí. Hablará de su hijo, su hijo es Antonio’. La inesperada situación se precipitó cuando ésta comenzó a llorar desesperadamente, agarrando con fuerza un crucifijo entre sus manos mientras continuaba diciendo: ‘Es Esther… Le duele… Tiene 50 años, es morena con canas, lleva una falda azul con flores blancas y una taza en la mano. |
Ésta es su casa y no se va a ir. Tiene un pie roto,
el pie derecho, se ha caído debajo de la higuera… Está muy
triste por su hijo Antonio ( … ). Dice que se tiene que
ir. Esta noche hablará con vosotros’. Posteriormente M. C.
afirmaría que Esther vivía en el año 1843.El lugar donde se había desarrollado la trama
correspondía a los antiguos sótanos de la casa de la
marquesa, que posiblemente no vieron alterada su estructura
por la construcción del nuevo edificio. Durante la larga
madrugada fueron registradas psicofonías de una nitidez
fuera de lo habitual. Destacamos entre todas ellas las
obtenidas a partir de las 2.1 5 de la mañana: ‘Hay mucha
energía, José’, ‘Soy yo’, y quizás la más impresionante,
correspondiente a la voz de una mujer joven que murmura:
‘Mamá, frío, miedo…’. la calidad de estas grabaciones
contrasta con las obtenidas por otros investigadores por su
fácil audición. Los análisis realizados a posteriori han
demostrado que se trata de incursiones de origen desconocido
procedentes de algo o alguien que se sitúa literalmente
sobre el micrófono. Sin embargo, es imposible que esto haya
sucedido físicamente, ya que tras acudir al lugar en una
segunda ocasión y controlar todas las estancias con un
circuito cerrado de televisión, que en todo momento ofrecía
imágenes en tiempo real de lo que ocurría en las
habitaciones, quedó patente que el edificio estaba vacío.
Pese a los monitores, las cámaras de vídeo, las
grabadoras, medidores de temperatura, cámaras fotográficas,
mesa de mezclas, micrófonos, magnetoscopios, 800 metros de
cable … se registraron nuevas grabaciones entre las que
des- taca por su claridad y rotundidad una voz que dice: «Yo
soy Dios’. La investigación continúa y en próximos números
les ofreceremos más datos de este espectacular suceso.
Corresponsales: José Martínez, Fernando Rosillo y
José Luis Tajada. |
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